Berlín...Parte 1

¿¿Dónde estaba?? ¿¿Por qué no escribía?? Entre las diversas razones se encuentran las clases, las tareas, las fiestas, etc, etc, y el viajecito recreativo del fin de semana en Berlín, junto con otros 50 estudiantes extranjeros en un tour todo incluido (bueno, casi) organizado por Foyer Intl. subsidiado en un alto porcentaje por la universidad (más de 80% ¡¡oh sí!!)...

Obviamente 2.5 días no son suficientes para poder conocer muy a fondo esa ciudad tan grande y llena de historia, pero no me puedo quejar, y ahora sí que fue un paseo lleno de sorpresas. De cierta forma vi todo lo más importante (aunque mucho fue desde el camión o el barquito en el río), además conocí muchas nuevas personas...y practiqué muchísimo mi alemán (los guías hablaban sólo en alemán, así que ya se imaginarán)...

Todo comenzó el viernes, cuando me desperté justo a la hora en que tenía que salir el camión gracias a la llamada de Razmig, quien también se había quedado dormido...por suerte pudimos llamar a uno de los organizadores y logramos que nos esperaran...Contra mi naturaleza femenina, logré salir en menos de 10 minutos con mi mochila casi completa (como siempre, me di cuenta después de todo lo que se me había olvidado) y a toda velocidad me dirigí con Cleta hacia el lugar donde todos nos esperaban, obviamente no muy contentos (¡¡perdooooón, perdoooooón!!)...

En fin, después de 4.5 horas de autobús con sus respectivas pausas (nuestro amable diva-conductor hizo 2 paradas, cada una de aprox. 30 mins. porque estaba cansado!! imagínense que haría en un trayecto D.F.-Puerto Escondido...¡¡en vez de 14 horas el trayecto duraría 17!! ja ja ja ja) llegamos a Berlín a un cómodo hostal (muy recomendable) y como teníamos (obviamente) que compartir habitación entre 5, conocí a 4 extranjeras muy simpáticas con las que pasé la mayoría del viaje...

Ese día visitamos el Pergamonmuseum (en la isla de los museos) y el Unterweltenmuseum... ambos muy interesantes, en especial el segundo porque no es un museo normal, es un paseo por pasajes subterráneos de Berlín donde uno puede ver restos de guerra y los refugios que se utilizaban en los tiempos de la guerra entre otras cosas (además de que el guía era muy chistoso y contaba anécdotas muy interesantes)...y claro, en la noche no podía faltar la debida convivencia en uno de los tantos bares de la ciudad...

CONTINUARÁ...